jueves, 29 de septiembre de 2011

VUELTAS EN ESPIRAL. BUSCANDO LO SUTIL


A veces y sólo a veces, cuando parece que nuestra vida va más lenta o que casi está inmóvil es cuando realmente está yendo más rápido. Sólo tenemos que fijarnos bien y ver que las cosas no son iguales que al principio del viaje. No llevamos las mismas cosas dentro de la mochila, nuestros deseos, necesidades han cambiado. Incluso es provable que nuestro cuerpo lo haya hecho también. Para variar, todo es cuestión de percepción.
Y la entrda de hoy va de eso, percepción.
El punto es que cada vez me doy más cuenta que la realidad en sí rara vez es objetiva, y más cuando está entrelazada con nuestra vida. La vida, es tal y como nosotros la vemos, la diseñamos, la creamos.
Tiene que ver con lo sutil, con lo que nos rodea y "no vemos", más que con las leyes físicas inmutables. Es decir, podré decidir si la vida es buena o no para mí; si estoy disfrutando este segundo, incluso decidir de antemano a las personas que voy a conocer dentro de poco.
Eso nos da un sentido de responsabilidad, ya que no depende ni de azares, ni de angelitos traviesos, ni de los despertares de dioses iracundos. Tan solo de nosotros, y eso suele escocer.
Una cosa a la que estoy dando vueltas últimamente es el hecho de cómo diseñamos esta vida. Nos pasamos la mayor parte de ella convencidos de que nos movemos como un barco de madera, movido por los caprichos del viento, pero no es así. Pero ¿entonces?. Creo que es cuestión de "comunicarnos" con nuestro cuerpo sutil, con nuestra esencia. Si os fijáis, sabemos en cada momento lo que necesitamos, simplemente tenemos que escucharlo. Es un equilibrio difícil de pedales. Si nos centramos en lo que necesitamos, estaremos enviando el mensaje que es esa necesidad la que deseamos. Si no nos centramos en ella, simplemente seguiremos tal y como estamos. Aquí viene otro "pero, ¿entonces?". Una clave interesante para salirnos de este remolino de incógnitas es fijarnos en algún momento de nuestra vida que hayamos atraído algo sin a penas darnos cuenta....de una forma inconsciente...¿cómo lo hicimos?. Parece que un momento parecido que todos tenemos en común es el enamoramiento correspondido. Entran en juego mecanismos sutiles que escapan a nuestra comprensión "mental". Simplemente, nos hemos dejado llevar. Lo interesante de todo esto es que esa situación de enamoramiento la diseñamos mucho antes de que en el mundo físico aparezca esa persona. Simplemente, "la llamamos". Una cosa curiosa que me ha pasado en mi vida es que siempre he tenido un sueño con la persona que iba a ser mi pareja, sin conocerla absolutamente de nada, sin haberla visto previamente, ni nada. Desde que he tenido el sueño hasta conocerla físicamente puede pasar como mucho un mes. Cada uno de nosotros tendrá su propia forma de diseñar, o de moverse en lo sutil. La entrada de hoy es simplemente un reclamo a nuestra atención "inconsciente", de que nos demos cuenta de que vivimos en un entorno más sutil que físico y que ahí es donde debemos coger el pico y la pala para trabajar en nuestras vidas. Como dirían en algún guión "es ahí donde realmente se decide la batalla de nuestras vidas".
Las fotos que pongo son de este fin de semana. Para variar, hay bastante simbolismo en ellas. Es la forma del caparazón del caracol lo que me atrae de ellas. Para mí, la analogía con nuestras vidas está en que damos vueltas, y vueltas, pero estas se van haciendo cada vez más pequeñas cuando más cerca estamos del centro, de nuestro centro. De nuestra esencia.
El video de hoy es de un grupo llamado Wolfsheim. Un grupo que me ha ido acompañando de una forma o de otra los últimos 12 años de mi vida. La canción se titula "The Sparrows and the Nightingales". Me fascina la voz del cantante Peter Heppner.

No hay comentarios:

Publicar un comentario