miércoles, 6 de julio de 2011

EXPERIENCIAS ENRIQUECEDORAS VS EXPERIENCIAS EMPOBRECEDORAS


  Cuando he decidido el título que le pondría a la entrada de hoy no he podido olvidar un libro que tenían mis abuelos en la salita de la tele. Era una edición literaria de la serie televisiva de los 70, "Hombre rico, hombre pobre". No me ha quedado más remedio que sonreír. Ya desde la primera vez que lo vi en la estantería me preguntaba si alguna vez habrían leído aunque sólo fuera el prólogo de ese libro.
La entrada de hoy no va a ir de riqueza en el sentido material si no de la riqueza en cuanto a la calidad de las experiencias vitales que he tenido a lo largo de mi vida.
Me he dado cuenta de un fenómeno muy curioso y es que sin tener una vida atormentada ni mucho menos, la mayoría de las experiencias que he tenido en el pasado han sido "experiencias empobrecedoras". No se trata ni de una queja, ni de buscar responsabilidades, ya que en este sentido, soy yo el responsable de, o bien haberlas creado o bien haberlas mantenido.
¿Qué entiendo por experiencias empobrecedoras?. Hechos, personas, sucesos, que han entrado en mi vida, y que no sólo me han aportado poco, si no que ha sido una experiencia que me ha desgastado, que no me ha comportado nada positivo. Son experiencias que me han dejado peor de como estaba antes de que sucedieran. Sé que la vida se mueve en torno a experiencias positivas y a  experiencias negativas (recordad la importancia del observador!!). Pues en mi caso, descubrí que la mayoría, eran negativas. Lo peor es que mi aprendizaje ha tenido que basarse en esas experiencias, con lo cual me he movido con un "mapa vital" igualmente empobrecedor.
Lo interesante viene desde el momento en que  tomo consciencia de este hecho. "Cuánticamente" (: D) la situación comienza a cambiar. No diré que desde entonces atraigo experiencias positivas... me encantaría decirlo, pero no sería verdad. Atraigo al mismo tipo de situaciones (hecho que estoy intentando modificar), pero sólo me centro en lo significativo, en lo enriquecedor de la situación, o de la persona. Sé que hay mucha gente que se siente identificada con este suceso, al menos entre los amigos con los que lo he comentado.
Lo más curioso del caso es que todos comenzamos con la frase "yo no me puedo quejar en relación con otros que realmente lo están pasando peor". Y es cierto. hay gente que lo está pasando muy mal y nos sentimos culpables cada vez que nos quejamos de lo "mal que lo hemos pasado". Mi abuela, sabia como todas las abuelas, tenía un refrán o una historia para cada situación. Una historia que me contaba bastante a menudo era la de un sabio que se quejaba amargamente de su suerte. Mientras gimoteaba, iba rompiendo las hojas de un arbusto que había cogido previamente. En un momento dado, este sabio se gira y ve a otro sabio gateando tras él, comiendo las hojas que éste iba tirando.
Es cierto que hay gente que está peor que nosotros, pero no por ello, ni debemos sentirnos culpables, ni debemos cruzarnos de brazos. Ya lo dije en una entrada reciente. Si algo no nos gusta, "enfadémonos" y hagamos algo. Yo me cansé de tener experiencias empobrecedoras, amistades empobrecedoras o pensar que yo mismo era empobrecedor. No basta con lamentarse. Da igual si es verdad o no, lo importante es que lo pensemos. Y en base a nuestros pensamientos montamos nuestra forma de vivir. Es así de sencillo, así de simple. Nuestra mente tiene menos misterios de los que parece... aunque si rechazamos lo evidente, es normal que nos parezca lo contrario. Por eso presento aquí mi conjura, la conjura de los necios (qué buen libro!!): Si no puedo tener siempre una experiencia enriquecedora, intentaré al menos hacer de cada experiencia algo que sea significativo. Me alejaré de lo que no sea así, aunque sean partes de mí mismo o de mi conducta. Y os invito a vosotros a que hagáis lo mismo. No hay nada como sentirse acompañado en la lucha, y sé que la gente que lee este blog está en ella y es significativa, rica, e importante para mí.
Qué largo me ha quedado!!. De verdad que pretendía ser una entrada muy ligera!. Vamos, os explico las fotos. La primera es del anochecer de ayer. Cuando llegue el invierno, no podré creerme que anocheciera casi a las 10 de la noche. Os parecerá una tontería ahora que es verano, pero no os lo parecerá tanto cuando sea noviembre, salgáis del trabajo o de donde sea a las 6, y ya sea noche cerrada. En cuanto a la segunda foto, es de mi habitación, y antes de que critiquéis mi desorden, deciros que precisamente en ese momento  estaba ordenando mi cuarto. (No sé si habrá colado)
Para concluir, un video que siempre me hace reflexionar, y me trae un montón de recuerdos. Se titula "Eden" y es de los belgas Hooverphonic. La letra es sencilla pero prometo que me mata...

No hay comentarios:

Publicar un comentario