lunes, 28 de febrero de 2011

NO DEJES DE TENER HAMBRE. NO DEJES DE ESTAR LOCO

 
Siempre he temido a los viajes largos, por una razón simple y despiadada: demasiado tiempo a solas conmigo mismo. Recuerdo viajes interminables como la ida a Dinamarca o la vuelta de Ávila como un hervidero de ideas, de propuestas de cambio, de mejoras, de tener que, de falta de aceptación de mi mismo. Fueron tales las taladradas de cabeza - como el personaje de "Pi" - que sólo con recordarlo, ya me vuelve el dolor de cabeza que sentí entonces.
No hace falta decir que no apliqué uno solo de los pensamientos frutos de los viajes. Con ellos - los viajes - siempre intento escapar de mi mismo y lo único que consigo son dos tazas.
Este fin de semana iba a estar casi 17 horas viajando por carretera y no quería que un solo pensamiento ni una sola percepción de miedo me pasaran por la cabeza. Lo conseguí. No pensé en nada, absolutamente en nada. Tal es así que ni tan solo recuerdo que pasaba por mi mente en ese viaje. Lo que sí os puedo decir es que fui feliz y que el viaje no se me hizo largo. Curiosamente me pasó todo lo contrario. No quería volver al destino (Ese es otro tema que dejaré para otra entrada).
Leí la semana pasada que la mayoría de nuestros pensamientos son negativos y que nos centramos en las cosas negativas de nuestras vidas favoreciendo un diálogo interior duro, cruel, híperrealista. Es cierto. Yo reconozco que me centro demasiado en las cosas negativas de mi vida: Así es fácil caer en el letargo. Si esa constante conversación negativa en vez de tenerla conmigo mismo la tuviera con un amigo, haría tiempo que le hubiera dejado por mezquino e insoportable. Le diría "tu negatividad es contagiosa y me hunde. Eres como un agujero negro. Me dejas sin energía". El problema es que soy como un 24x7 del pensamiento negativo. Y así es imposible cambiar. En la próxima entrada quiero hablar de los miedos pero antes quiero contaros una cosa. Por necesidades de la profesión esta semana he tenido que ver muchos blogs, pero que muchos. La mayoría de ellos son de una calidad extraordinaria. Se nota que hay mucho amor y dedicación en ellos. Pero hubo uno, no lo citaré, de una chica... una maestra que por su forma de enfocar la vida me pareció totalmente especular a mi. Es decir, muchas de las cosas que escribía las podría haber escrito yo. Ella era también una buscadora. Pero por la forma en que escribía, las palabras que usaba, la importancia que le daba a las coincidencias pasivas (aquellas que no reportan nada significativo o no "te mueven"). Me di cuenta que estaba perdida y llena de miedo. Tanto como yo lo puedo estar (aunque en mi caso creo ir mejorando). No había alegría. había necesidad de encontrar, de cambiar. Y le puedo decir sin ningún género de duda que se plantará en los 60 y no habrá encontrado lo que busca. Y es que es cierto. Nos han enseñado a centrarnos en el problema y no en la solución. En el miedo y no en el amor, alegía o entusiasmo. En no ser egoistas como sinónimo de renunciar a ti mismo, a tu forma de ser, a permanecer vacío. En muchos libros de autoayuda dicen algo que me inquieta "da y recibirás". Da 5 euros y recibirás 100 aunque sean tus últimos 5 euros. Puede que eso le funcione a alguien pero no a la mayoría. Para dar, primero tienes que estar lleno, decir "ya que solo me quedan 5 euros, me voy a hacer un regalo. O si experimento el mismo gozo, pues... voy a hacerle un regalo a mi pareja". Recuerdo que cuando me iban a echar de uno de mis primeros trabajos, en lo único que pensaba era en hacerle un regalo a mi novia. Como una forma de decirla a ella que la quiero, a mi que no me preocupe y a la vida que no la tengo miedo. Sé que puede parecer contradictorio. Pero lo que quiero decir es que dar por dar solo acrecienta la pérdida, pero dar cuando estás lleno - y no me refiero a dinero si no más bien a un sentimiento de plenitud - entonces sí que es cuando hay que dar y ahí sí que es cuando recibes. (Una sonrisa, o un beso pueden ser 100 veces más que lo que has "invertido").
Ese blog me ha hecho pensar mucho. Supongo que debería escribirla y ayudarla, no solo por el hecho de que es muy parecida a mi y he pasado por su camino hace nada, sino porque se la ve una persona extraordinaria. (De hecho, no conozco a una sola persona que no lo sea).
El video que pongo hoy es un discurso de Steve Jobs (espero haberlo escrito bien ;-) ). Un discurso que hizo a los graduados de una prestigiosa universidad de los States. Os lo recomiendo. Es muy inspirador. Habla de seguir la intuición. De amar lo que haces con pasión y locura. De no tener miedo pues lo que hoy te parece malo, mañana puedes verlo como la mayor bendición del mundo. Disfrutad de la semana. Sed buenos y sobre todo muy curiosos.

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