sábado, 5 de febrero de 2011

TEORÍA ESPECULAR: PRIMERA PARTE

 

Esta entrada promete ser algo densa y es que estoy en pleno proceso revolucionario. Durante esta semana han pasado muchas cosas en mi mundo interior. Hay gente que explora altas montañas, yo exploro mi interior. Todo viene de una necesidad y la mía la de comprenderme para poder cambiar, para ajustar los mecanismos que no me hacen ningún bien y me impiden desarrollar en plenitud.
Comenzaré diciendo que durante estos 7 días tuve la necesidad de ver dos veces el video de Joe Dispenza sobre "la curación". Siempre he sido muy esquivo al tema de la sanación pues siempre lo he visto como un remedio sobre el "mundo físico"; la salud, vaya... para no sonar tan grandilocuente. Pero he aceptado que uno puede estar enfermo de muchas maneras, no solo físicas o psíquicas. Y ahi aparezco yo, alguien que tiene un problema con su yo-estructural. Me fijé en los 4 síntomas que, según Joe Dispenza, presentaban todos los pacientes que mostraban una remisión espontánea de sus enfermedades.
1) Aceptación de que hay un "algo" superior. Puedes llamarle Dios, Energía Universal o Pedro Picapiedra, pero que estaba ahí y que era tan fácil de ver como el aire que respirábamos. Yo siempre he tenido problemas para entender ese concepto. Nunca he sabido ver a Dios (o lo que sea) y puedo asegurar que lo he intentado. Ayer, meditando sobre esto, pensé que en mi caso - ignoro el de los demás aunque me ayudaría saberlo - era un dios que se comportaba igual que mis padres se habían portado conmigo y no sólo por el hecho de ignorarme, si no por que más que le pedía no conectaba con él. Os aseguro que si pedia era algo era básicamente un poco de caso.
2) Los pensamientos recurrentes y la percepción de uno mismo son los que nos han llevado hasta aquí (Sé que es una opinión fácilmente recurrible, pero quedémonos con el concepto para adultos). Eso en mi caso es verdad, siempre pienso lo mismo. Me siento como el conejo de Alicia; corriendo de un sitio para otro con el reloj en la mano "queda muy poco tiempo". Siempre tengo una fecha límite, a la que llegaré ahogado y sin dinero. Así que pensé; vale, debo dejar de ponerme esa fecha por que ahora sólo la conozco, está en mi cabeza". Eso no va a hacer que el problema desaparezca, está claro pero verdaderamente, pensar tanto nunca me ha ayudado a encontrar una solución.
3) Ser otra persona. Aquí está la clave de todo. Ser otra persona. No fingir ser otra persona, ni actuar COMO otra persona sino SER otra persona. No es nada fácil pero entiendo muy bien el concepto. Trasladado a mi caso, llevo un tiempo pensando que yo como yo ya está quemado, que no puedo salir de ésta por la sencilla razón, y en pleno ataque de humildad, doy lo que doy y no puedo dar más de mi mismo. De aquí saldrá mi teoría "especular" que expondré más tarde.
4) Son personas que con el nuevo cambio se quedan absortas en su actividad, trabajando en algo nuevo, usando la parte frontal del cerebro. No detallaré más, estoy demasiado lejos de ésto para prestarle atención - hoy por hoy.
El viernes elaboré una teoría; la "Especular" y es que nosotros, los humanitos, no atraemos ni dejamos de atraer sino que de alguna forma, que desconozco, lo que pasa es reflejo de nuestra percepción de nosotros mismos. No digo un reflejo de nosotros ya que se puede contar con la mano la gente que realmente se conoce y acepta. Ningún cambio se puede producir sino se altera el "spin" de esa percepción. No estoy hablando de si nos vemos gordos, feos, listos o guapos. Es algo mucho más profundo. Por definirlo de alguna forma, diría que es la forma en la que nos comunicamos con la vida, con los demás. Por eso, para muchos no sirven los libros de autoayuda ya que el pensar "soy guapo y rico" choca violentamente con la percepción especular de uno mismo y eso le hunde más. La percepción lo es todo y una idea es solo una idea si no rema en la misma dirección. Esa percepción se forja día a día, desde que nacemos; por la relación con nuestros padres, nuestros profesores etc. Está claro que un niño de 5 años no tiene todavía ninguna percepción de si mismo (en el sentido de autoetiquetarse, no en cuanto a su individualidad del yo). Así que lo que hace es chupar como una esponja las opiniones vertidas y percibidas sobre él por los demás. Y ojo con las percepciones pues aunque los adultos le digan lo magnífico que és sino percibe que hay un respeto, que hay un cariño, una confianza hacia lo que él hace o dice, el mensaje quedará anulado por inconsistente. Los niños son unos extraordinarios psicólogos.Abren los ojos para estar atentos a su derredor.
Pondré el video de Joe Dispenza sobre la Mente Inmortal parte 1

No hay comentarios:

Publicar un comentario